01. Metano 54, Mirinda y héroes potenciales

Peripecias estelares01b

En el año 2099 la Tierra no es ni sombra de lo que era sólo cien años atrás, lo cual ya es mucho decir porque para aquel entonces estaba ya bastante desmejorada. El punto de no retorno fue el accidente del 2096 que provocó una fuga masiva de gas metano54 en todas las centrales energéticas del planeta. Las vacas y sus gases constituían la única fuente de energía desde el agotamiento de los combustibles fósiles, así que había granjas y centrales por doquier. Los nuevos piensos ultratransgénicos utilizados para alimentar al ganado vacuno tuvieron como resultado un nuevo gas, desconocido hasta entonces, derivado del metano de toda la vida, con una potencialidad energética 54 veces superior al metano tradicional pero altamente tóxico. Los resultados de la fuga fueron fatales. La dosis, dada la abundancia de puntos de producción energética, fue letal para todos los seres del planeta.

¿Para todos? No. Para todos no. Los aquejados de neumonitis dioxidocarbonostálgica, una rara enfermedad surgida a raíz de la falta de dióxido de carbono en la atmósfera que causaba alergia al aire libre de partículas contaminantes de este tipo, estaban condenados a tomar Aeronolín, un medicamento que, pudiendo curar la enfermedad añadiendo únicamente un chorrito de Mirinda a su fórmula magistral, se limitaba a asegurar la supervivencia del paciente. La falta de ética de la industria farmacéutica, conocedora de la cura de la enfermedad, condenó a los enfermos a una dependencia absoluta de su producto y a llenarles los bolsillos hasta el día de su muerte. Ese día no llegó, sin embargo, antes del fin del mundo conocido para la especie humana y resto de especies coetáneas, puesto que el Aeronolín contaba, por puro accidente, con un componente que inmunizaba al paciente contra los efectos tóxicos de cualquier tipo de gas terrestre. Los farmacéuticos no lo contaron pero sus pacientes sí. A ellos, el metano54, plin.

¿Plin? No. Plin tampoco. El aire, por contaminado que estuviera, seguía sin contener el dióxido de carbono que les permitía seguir con vida. Los supervivientes se agruparon en pequeñas colonias y se organizaron para asegurarse el suministro de Aeronolín necesario para su supervivencia saqueando los almacenes de productos farmacéuticos. Eran plenamente conscientes, sin embargo, de que aquella solución no era más que un parche, puesto que las reservas del medicamento eran limitadas y, además, sabían que una buena parte de ellas había caído en manos de los trátor, una especie alienígena altamente agresiva que, para desgracia de nuestro reducto de supervivientes, había ganado la porra interplanetaria que se había organizado entre los habitantes del espacio exterior, consistente en aproximarse lo máximo posible al año en que el ser humano se cargaría el único planeta del que hasta entonces disponía para vivir. Los trátor acertaron de pleno. Su victoria les daba derecho a explotar el planeta como mejor les conviniera. Desde entonces la Tierra no es sino el vertedero del universo entero, gestionado por sus nuevos propietarios, que explotan a los últimos humanos haciéndolos trabajar a cambio de dosis de Aeronolín.

Para cambiar esta situación un grupo de insurrectos ha decidido ir en busca de la fórmula ancestral de la Mirinda que, según la leyenda, se encuentra en algún punto del universo, a saber cuál, a buen recaudo y vigilado permanentemente por su especie opresora. Pretenden con ello sumarla a la composición química del Aeronolín y conseguir, por fin, una cura a su enfermedad. Ahora sólo tienen un problema: todos quieren salir en misión espacial.

Vota en la encuesta quién quieres que surque el espacio exterior para salvar a lo que queda de la humanidad. Próxima entrega el próximo viernes 28 de junio.

10 comentarios

  1. Oooooooooooh, a votar!!!! Click, click, click, cómo mola! 🙂

    Me gusta

    1. Lauritaaaa! Te echaba de menos! Dale, dale, click, click! 🙂

      Me gusta

  2. votaoooooo

    Me gusta

    1. Graciassss. A ver si esta vez también te sales con la tuya 😉

      Me gusta

  3. Mirindaaaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!!!! Ohhhhhh!!

    Me gusta

    1. Ya lo dice tu hermana: soy una nostálgica… jajaja

      Me gusta

  4. Afrodita que si es ingeniera espacial sabrá manejarse con la nave y a Giuseppe no le veo mucha utilidad como no sea que salga bien peinada en las videoconferencias.
    De qué color con los trátor?? Se puede votar?? Jejeje
    Que disfrutes del largooooo fin de semana!!!

    Me gusta

    1. Nunca se sabe cuándo te va a hacer falta un peluquero… a lo mejor los trátor son unos señores muy peludos y puede sacarle un rendimiento al asunto…
      Buen finde!!!

      Me gusta

  5. Comienzo mi viaje estelar, aunque algo tarde, ma sin tráfico 🙂

    Me gusta

    1. ¡Buen viaje! 🙂

      Me gusta

Deja un comentario